La pasada semana participamos, representados por nuestro presidente y consejero delegado, en el evento “Inversión en el sector inmobiliario a través de una SOCIMI del MAB” que organizaron CEOE y Renta 4 Banco.
Joaquín López-Chicheri tomó la palabra en la mesa redonda dedicada al segmento residencial, junto con los representantes de Témpore Properties (la SOCIMI de SAREB), Vbare, Barcino y Almagro Capital.
En el transcurso de la mesa (pueden consultar la presentación desde el botón al final del artículo) explicó que Vitruvio Socimi está diseñada para replicar la inversión patrimonialista de siempre. El objetivo es facilitar el acceso a una cartera diversificada de inmuebles a inversores y ahorradores. Parece evidente que son pocos los privilegiados que pueden confeccionar su propia cartera de inmuebles por un valor superior a los 100 millones de euros y contratar un equipo profesional dedicado a la gestión. La cartera de Vitruvio tiende a dividirse entre inmuebles residenciales, locales comerciales y oficinas, aunque actualmente hay, además, una parte residual invertida en naves que es previsible ir desinvirtiendo progresivamente.
Vitruvio Socimi está diseñada para replicar la inversión patrimonialista de siempre»
Destacó también las líneas maestras de nuestra estrategia: buenas valoraciones, diversificación por usos e inquilinos y poca deuda. Porque “Vitruvio se crea para estar aquí después de la siguiente recesión, no para jugar el ciclo”. Otra de las características que nos definen es el elevado número de accionistas (más de 290 a cierre de trimestre).
Ya en el turno de preguntas, Joaquín López-Chicheri señaló la importancia de la liquidez de la acción para los inversores, siendo Vitruvio Socimi la que cuenta con un mayor número de días con operaciones de compraventa en el MAB en lo que va de 2018. Y es que, dijo, “somos pequeños pero siempre hemos respetado la filosofía de la SOCIMI” en clara referencia al hecho de que el régimen fiscal bonificado de este tipo de sociedades se diseñó para incentivar la creación de inmobiliarias donde los ciudadanos pudieran acceder a carteras diversificadas de inmuebles con gestión profesional, como se señalaba también al principio de esta entrada. También contó cómo una ampliación de capital “ayuda a repensar la estrategia de tu propia gestión, a poner en orden el mensaje de la compañía”.
Nuestro reto, aseguró nuestro presidente y consejero delegado, es seguir creciendo en tamaño, pero gracias a nuestro perfil conservador y la visión a largo plazo de quienes formamos el accionariado, podemos hacerlo más despacio, sin prisas, para hacerlo bien.