Joaquín López-Chicheri, presidente y consejero delegado de Vitruvio Socimi, ha repasado toda la actualidad del sector inmobiliario en una entrevista en el programa Capital de Radio Intereconomía, que dirige Susana Criado.
La entrevista arranca con algunos datos significativos del sector en España: en el primer semestre del año se han vendido más de 262.000 viviendas, un 10,9% más que el mismo periodo del pasado año. Sobre una posible burbuja inmobiliaria, López-Chicheri destaca que “en el pico de la burbuja anterior se llegó a 900.000 visados de obra nueva”, frente a los 100.000 concedidos en 2017, lo que muestra que “estamos lejos de datos de otra burbuja”. Además, existe una “dicotomía muy grande entre capitales de provincia y ciudades secundarias y las principales capitales de España”, lo que muestra que el mercado inmobiliario de Madrid y Barcelona se ha recuperado de una manera “más ágil y rápida”.
Sobre el camino que le queda por recorrer al sector inmobiliario, afirma que los usos comercial y de oficinas «sí están más avanzados en el ciclo que el uso residencial”. Mientras que el “inversor institucional no compra vivienda para alquiler (apenas representa un 3-5% del total), en el residencial el parque de viviendas está controlado por los privados individuales (cerca del 95%)”.
Sobre el papel de la SOCIMI, el presidente de Vitruvio señala que el inmobiliario debe fijarse en los flujos: “Lo importante es la leche que da la vaca, no comprar la vaca y venderla mañana”. Ese enfoque “no especulativo” en el que se centra Vitruvio –cartera de residencial, oficinas y locales-, que destina al alquiler: “Lo que hacemos es alquilar nuestra cartera, la gestionamos, mejoramos los inmuebles, se invierte para que generen más rentas y estas rentas se reparten entre los accionistas”. Una de las obligaciones de las SOCIMIs es el reparto como mínimo del 80% del beneficio generado por las rentas de alquiler: “es una forma de asegurarse unos flujos”.
Para López-Chicheri, la clave de Vitruvio Socimi es que “hemos conseguido que nos acompañen, a día de hoy, 288 accionistas donde ninguno tiene una posición de control y que tienen una visión de largo plazo, no especulativa, orientados a tener un 3% de dividendo y una revalorización algo superior a la inflación gracias a la actividad de rehabilitación que hacemos en nuestros inmuebles de alquiler”. Y concluye que Vitruvio no es “para dar un pelotazo inmobiliario”.
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