Casi con un pie en el año que viene, Vitruvio ha sido capaz de rematar el ejercicio 2019 con una operación de aportación adicional: la cartera inmobiliaria de Fidelgés. A finales de septiembre se firmaba la adquisición del 35% de la sociedad, propietaria de tres activos ubicados en el centro de Madrid en localizaciones inmejorables: edificio en C/ Duque de Rivas 4, edificio en C/ Tribulete 23 y cuatro viviendas y un local comercial en C/ Aguirre. Vitruvio tiene previsto invertir 4,5 millones de euros en los inmuebles para mejorar los ingresos, adecuarlos a la demanda actual y extraer valor de los mismos.
La operación se enmarca en los acuerdos que Vitruvio promueve con aquellos propietarios de inmuebles que encuentran en el vehículo una salida muy recomendable a situaciones de proindiviso, es decir, propietarios que comparten la titularidad de un activo con otras personas. La compra se ha estructurado en dos pasos:
Se espera que quede fusionada en lo que resta de año. La actividad principal de Vitruvio, en el aspecto corporativo, en el ejercicio 2019 ha estado centrada en la compra de la socimi Única. En una primera fase, realizando una ampliación de capital dineraria de 14,5M€ para captar fondos y, en una fase posterior, se presentó la Oferta de Adquisición (OPA), que logró una exitosa aceptación por parte de los accionistas de Única del 90%.
El remate de la adquisición, por lo tanto, se produce ahora con la fusión de las compañías. Vitruvio pasa a ser una sociedad con más de 400 accionistas, con un tamaño de cartera de 160M€, unos ingresos cercanos a los 9M€ y una mejora en el beneficio por acción de aproximadamente el 20% (sin tener en cuenta la inminente incorporación de Fidelgés).
Habiendo aumentado el tamaño considerablemente este año, la intención es continuar siendo fieles a nuestros principios, gestionando una cartera equilibrada en usos y en ubicaciones céntricas con elevada demanda de ocupación, con una base diversificada de inquilinos y respetando los límites de endeudamiento autoimpuestos.
Porque Vitruvio, desde su fundación en 2014, ha conservado la filosofía patrimonialista, de largo plazo y no especulativa que cinco años más tarde siguen compartiendo sus accionistas.