Carta al accionista – 2º Trimestre 2024
Cumplimos hoy diez años desde la primera adquisición el 15 de julio de 2014 y lo hemos celebrado el pasado 26 de junio en Abante (ver vídeo aquí). Ayala fue la primera operación y, sin duda, la más importante de mi vida profesional. Fue clave para la posterior aportación de Sagasta. Con ambas operaciones en cartera y algunas compras directas adicionales, se pudo acordar la aportación de los inmuebles en Goya y salir a cotizar en julio de 2016. Todo lo anterior, a su vez, fue posible gracias a 360ºCorA, a las primeras decenas de accionistas que invirtieron su dinero confiando en el proyecto y al extraordinario equipo humano que se había formado.
Porque Vitruvio es la demostración de que el trabajo en equipo, la colaboración y la generosidad de todos los involucrados ha conseguido que aquella socimi de apenas 7 millones de euros tenga, a cierre de junio de 2024, inmuebles por 190 millones, 300 inquilinos y 680 accionistas.
Para rematar el aniversario, la familia que apostó por Vitruvio aportando Sagasta en 2015 ha decidido repetir con una segunda aportación. No hay mejor demostración de que nuestro modelo funciona. Presentaremos la operación a la junta de accionistas después del verano.
No se podrían haber retomado las operaciones de aportación y el crecimiento experimentado en 2024 sin el impulso que para Vitruvio supuso su integración en el grupo Abante el año pasado. Porque Abante trabaja como una única compañía, con un modelo robusto y construido con mimo -y mucho trabajo- durante más de 20 años. Porque la independencia, la visión de largo plazo y las capacidades que detenta Abante incluyen ahora a Vitruvio y hacen de la propuesta del grupo algo único en el mercado.
Lo que hemos conseguido estos diez años ha sido posible gracias al apoyo incondicional de la familia, a la fidelidad y el trabajo de mi querido tridente -Elena, Cova y Jorge- con el respaldo de mis socios y la integración en Abante. Sin olvidarnos de nuestros inquilinos y los asesores que nos han ayudado tanto. Y ha sido posible, también, gracias a tantos accionistas de Vitruvio que confían en lo que hacemos y, sobre todo, en lo que está por venir.
